Pequeño hotel en una preciosa casa-palacio, la casa natal de Orellana. Servicio muy atento y diligente (dentro y fuera del hotel). Salones, patios, jardines muy bonitos y elegantes.

Habitaciones amplias, cómodas, bien iluminadas y decoradas. Muy recomendable. Podría mejorar la cobertura de wi-fi (solo en el comedor).

Opinión escrita el 10 abril 2016 en TripAdvisor